12 dic El ajo. La gran ayuda a la hora de adelgazar.
El ajo es una planta perteneciente a la familia Allium. Desde los egipcios hasta la antigua Grecia, el ajo era recetado para tratar distintas patologías. Más allá de considerarse un ingrediente gastronómico importante por su sabor y aroma, lo cierto es que posee propiedades medicinales.
Uno de los compuestos de azufre que se forma cuando se pica o se mastica un diente de ajo, compuesto llamado alicina, es el mayor responsable de los beneficios que proporciona a nuestra salud.
Pero no es el único, puesto que una porción de ajo de una onza (28 gramos) contiene:
- Manganeso: 23 % de la CDR.
- Vitamina B6: 17% de la CDR.
- Vitamina C: 15% de la CDR.
- Selenio: 6% de la CDR.
- Fibra: 1 gramo.
- Calcio, cobre, potasio, fósforo, hierro y vitamina B1.
Con alto contenido en vitamina C, vitamina B6 y manganeso; el ajo posee pocas calorías y contribuye a mejorar distintos aspectos de nuestro cuerpo.
Al contener antioxidantes retrasa la oxidación causada por los radicales libres, retrasando el proceso de envejecimiento. El consumo de ajo, aumenta las enzimas antioxidantes y reduce el estrés oxidativo en personas con hipertensión.
El ajo ayuda a disminuir el colesterol Total y el LDL (llamado colesterol malo), si bien no existe evidencia.
Además contribuye a prevenir enfermedades cerebrales como el alzhéimer y la demencia, debido a que colabora en la reducción de colesterol y presión sanguínea por sus propiedades antioxidantes. Constituyéndose así, como un elemento efectivo en la prevención de enfermedades cardiovasculares.
Los suplementos de ajo son conocidos por mejorar el funcionamiento del sistema inmunitario. De acuerdo con un estudio, una dosis elevada de extracto de ajo (2,56 gramos por día) puede reducir en un 61 % el número de días de enfermedad por resfriado o gripe.
El ajo natural es una gran ayuda a la hora de adelgazar. Suprime el apetito y facilita la eliminación de grasa corporal además de ayudar a incrementar el nivel de insulina, reduciendo así los niveles de azúcar en la sangre.
Sirve como un gran depurador, limpiando el organismo y protegiéndolo de bacterias y hongos. Es también un potente antinflamatorio.
El ajo ayuda a incrementar los niveles de serotonina en el cerebro. La serotonina funciona como neurotransmisor y es considerada por algunos científicos como la sustancia química reguladora del estado de ánimo.
¿Cómo consumirlo?
- Para iniciar bien nuestros días comer un diente de ajo con el desayuno.
- Utilizarlo como entrada en las comidas. Picarlo y consumirlo en una rebanada de pan tostado con aceite de oliva.
- Se puede consumir su ralladura en prácticamente cualquier alimento como un revuelto de huevo y zapallito, pastas, carne e incluso ensaladas.
- También podemos consumirlo como si fuera una pastilla tomando abundante agua.
Las virtudes medicinales del ajo sólo tienen efecto si se consume crudo. Lo dice el refrán “ajo cocido, ajo perdido”.
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