[:es]La insuficiencia venosa es la incapacidad que tienen las venas de las extremidades inferiores de devolver la sangre al corazón y de hacerlo al ritmo y velocidad adecuada.
Las venas son las encargadas de transportar la sangre hacia el corazón y si estas no funcionan adecuadamente tampoco lo hace nuestro sistema circulatorio. Las paredes de las venas tienen unas válvulas diminutas que se abren y se cierran. Sirven para ayudar a controlar la presión y el flujo de la sangre, facilitando su adecuado retorno al corazón.
En el caso de los miembros inferiores, existen fundamentalmente dos sistemas que permiten que la sangre venza la fuerza de la gravedad y regrese al corazón:
- Las válvulas de las paredes de las venas tienen un movimiento unidireccional ascendente hacia el corazón, lo que permite el flujo.
- La bomba muscular funciona gracias a las contracciones musculares de las piernas. Las venas de las extremidades inferiores se encuentran situadas entre los músculos por eso cada contracción exprime las venas y permite el flujo ascendente de la sangre. El sedentarismo y la falta de ejercicio pueden predisponer al desarrollo de esta insuficiencia, ya que la bomba muscular no se activa.
Sin embargo, cuando las venas de las piernas pierden elasticidad, se dilatan y provocan que las válvulas estén muy separadas unas de otras y no cierren bien. Como consecuencia, la sangre, atraída por la fuerza de la gravedad, se acumula en las piernas, produciendo la Insuficiencia Venosa.
Dentro de los síntomas más usuales de la insuficiencia venosa podemos mencionar: dolor de piernas, hinchazón de pies y tobillos, hormigueos, pesadez, calambres, arañas vasculares, várices y úlceras varicosas.
10 reglas de oro para mejorar la circulación venosa
- Evitar cualquier compresión local en los músculos de pies y piernas (calzado o ropa ajustada)
- Realizar baños calientes en las piernas de hasta 38 °C y alternar con agua fría. Mojar las piernas con agua caliente por unos minutos y luego cambiar a agua fría durante apenas unos segundos. Procurar que todas las duchas que tome sean de corto tiempo y evitar los baños de inmersión.
- Controlar el exceso de peso con una alimentación de bajo contenido calórico.
- Para evitar el estreñimiento, mantener una dieta alta en fibras.
- Evitar estar largo tiempo de pie sin moverse.
- Realizar masajes ascendentes desde el tobillo a la rodilla.
- Evitar temperaturas ambientales elevadas.
- Elevar los pies durante 30 minutos al mediodía y dormir con las piernas levemente elevadas. Se pueden colocar tacos en las patas de la cama para elevar la zona de los pies 10 a 20 cm.
- Realizar actividad física regularmente y ejercicios gimnásticos adecuados.
- Frente a síntomas de Insuficiencia Venosa, consultar a un médico especialista.
Ejercicios Gimnásticos