09 mar Menopausia
El término menopausia tiene una connotación negativa para muchas mujeres: aparecen los miedos, la preocupación, las contradicciones. Cada mujer vivenciará este momento de una manera diferente, y la mejor forma de abordar este ciclo vital es hacerlo de manera integral.
La menopausia es la época de la vida de una mujer en la cual deja de tener menstruaciones. Suele ocurrir naturalmente, con mayor frecuencia después de los 45 años. La menopausia se produce porque los ovarios de la mujer dejan de producir las hormonas estrógeno y progesterona.
El término climaterio se refiere a una época en la vida de la mujer en que se producen una serie de cambios, y ocurre la transición de la época fértil a la época no fértil.
Aunque ambos términos (menopausia y climaterio) a menudo se confundan y se usen indistintamente, lo cierto es que la menopausia es solo un signo más dentro del conjunto de fenómenos que se producen en el climaterio, aunque, sin duda, es el más importante. La duración del climaterio es de unos 10-15 años, y la menopausia lo divide en dos fases:
- La premenopausia (la época anterior a la última regla, que dura unos 3-5 años).
- Y la posmenopausia (la época a partir de la última regla, que dura unos 7-10 años).
Hablamos de menopausia precoz si la última regla se produce antes de los 40-45 años (menos del 4%), y de menopausia tardía si todavía existen menstruaciones después de los 55 años.
Una mujer llega a la menopausia cuando no tiene un período menstrual durante un año. Los cambios y los síntomas pueden empezar varios años antes. Éstos incluyen:
- Cambio en las menstruaciones: Más o menos duraderas, más o menos profusas, con más o menos tiempo entre los períodos
- Calores y/o sudoración nocturna
- Dificultad para dormir
- Sequedad vaginal
- Cambios de humor
- Dificultad para concentrarse
- Menos cabello y más vello facial
Durante la época reproductiva, en el ovario se encuentran muchos folículos primordiales que son los que, tras su maduración, darán lugar al óvulo femenino que saldrá del ovario. Esto recibe el nombre de ovulación y, para que se lleve a cabo, son muchas las hormonas que han de estar implicadas en el proceso. Además, el ovario es el responsable de la producción de estrógenos, que son las hormonas encargadas de mantener los órganos genitales femeninos, así como de muchos de los cambios que ocurren durante el ciclo genital.
El fenómeno central que tiene lugar en el climaterio es el cese de la función ovárica, de tal forma que deja de producir las hormonas como en la edad reproductiva, y hay un agotamiento de los folículos primordiales, por lo que los ciclos menstruales empiezan a fallar.
Aunque son muchas las alteraciones hormonales que tienen lugar en el climaterio, la más importante, y aquella que originará los síntomas, es el descenso de los estrógenos.
La disminución de los niveles de estrógenos también impacta en la estructura y función de la piel, mediante un proceso denominado envejecimiento hormonal. Estos cambios terminan afectando diferentes funciones, y se traduce clínicamente en laxitud, arrugas y xerosis (sequedad, que puede generar prurito), mayor susceptibilidad a los traumatismos, disminución del flujo vascular cutáneo, alteración en los procesos de cicatrización, termorregulación y de defensa inmunológica.
La llegada de la menopausia es necesaria abordarla de manera integral. Para tener resultados óptimos, consultar con médicos especialistas en ginecología, nutrición, dermatología y psicología.