02 mar Osteoporosis
La osteoporosis es una enfermedad de los huesos en la que estos se vuelven frágiles y se fracturan con mayor facilidad. Los huesos están en constante remodelación durante toda la vida, de modo que el tejido oseo se forma y se reabsorbe continuamente. En niños y adultos jóvenes predomina la formación; alrededor de los 30 años se obtiene la masa ósea máxima y después predomina la reabsorción.
La pérdida de densidad ósea es un proceso normal después de los 30 años de edad, que se acelera a partir de los 45 años, sobre todo en las mujeres.
En el hueso, la vitamina D se una a las células formadoras y estimula la síntesis de proteínas. Junto con la administración de complementos de calcio, la vitamina D puede suprimir la destrucción del hueso, ayudando a proteger la masa ósea y a reducir la incidencia de fracturas por osteoporosis.
Las causas de la Osteoporosis son múltiples:
- Herencia
- Déficit de hormonas (estrógeno)
- Baja ingesta de calcio
- Sedentarismo
- Tabaquismo
- Abuso de alcohol
- Ingesta elevada de bebidas cafeinadas.
Después de los 45 años (en especial en las mujeres) se hace evidente el encorvamiento de la espalda y la pérdida de estatura, esto se debe a que la densidad mineral de los huesos disminuye y algunas vértebras se aplastan por osteoporosis.
Desde etapas tempranas de la vida, niñez y juventud, la ingesta de calcio y vitamina D en los alimentos y complementos debe ser adecuada. A partir de los 35 años de edad un complemento de calcio puede reducir la pérdida de masa ósea. Después de los 50 años es posible que el calcio no se fije bien en los huesos por deficiencia de vitamina D. El ejercicio físico moviliza los músculos y estimula la formación de masa ósea. Es necesario evitar hábitos nocivos, como el tabaquismo y el abuso de alcohol.
La vitamina D regula la cantidad de calcio que se absorbe en el intestino, así como la que circula en la sangre y la que se excreta por la orina. La exposición a los rayos ultravioletas del sol la hace más activa.
Cambios de hábitos necesarios para no sufrir fracturas
Actividad física
El ejercicio físico, adecuado a la edad y características de cada persona, practicado en forma regula, es muy importante para mantener los huesos sanos. Son recomendables los ejercicios como caminar, subir y bajar escaleras, danzar, natación.
Alimentación
En la dieta habitual, la leche y derivados de los lácteos, así como también algunos frutos secos, vegetales y pescados son las mejores fuentes de calcio.
Estilo de vida
Además de lo referente a la dieta y al ejercicio físico que acabamos de comentar, hay diversos aspectos de la vida que deben modificarse para prevenir la osteoporosis, tales como dejar de fumar o beber alcohol en exceso, y vigilar las posturas que se adoptan tanto en reposo como durante el ejercicio.
