Vida activa, vida saludable.

Vida activa, vida saludable.

Vida activa, vida saludable.

Si sumas pausas activas a tu rutina, pronto podrás sentir cómo tu cuerpo y rendimiento se benefician. Este hábito saludable ayuda a mejorar la postura, a encontrar momentos de relajación física y mental, y a activar la circulación y oxigenación cerebral.

Te acercamos una serie de ejercicios que podés incluir en tus pausas activas. Repetí cada uno de los ejercicios dos veces, sosteniendo la posición por algunos segundos. Recordá inhalar profundamente por la nariz y exhalar lentamente por la boca.

 

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  • Con ambos brazos levantados, estirarse hacia el techo primero con una mano y luego con la otra.

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  • Estirar un brazo e inclinarlo hacia el costado sobre la cabeza para elongar el tronco.

 

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  • Para elongar los músculos del antebrazo, estirar un brazo por vez hacia adelante con la palma de la mano hacia arriba y con la otra empujar suavemente los dedos hacia abajo.

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  • Con una mano apoyada sobre la cabeza, llevar suavemente la oreja hacia el hombro de ese brazo. Hacer lo mismo con el otro lado.

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  • Tomarse la nuca con ambas manos. Acercar los codos todo lo posible y dirigirlos despacio hacia abajo, llevando el mentón hacia el pecho.

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  • Manteniendo la cadera fija, rotar suavemente la cintura en ambos sentidos.

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  • Tomar el empeine con la mano del mismo lado y llevar el talón hacia la cola. Si no se alcanza a agarrar el pie, utilizar una silla para apoyar el empeine levantado.

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  • Con una pared como sostén, adelantar una pierna y flexionarla. Dejar la de atrás estirada, con la planta del pie apoyada contra el piso. Son despegar el talón, llevar las caderas hacia adelante.

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  • Separar levemente los pies. Inclinar el tronco hacia adelante, despacio y con las rodillas apenas flexionadas. Mantener el cuello y los brazos relajados. Levantarse con la espalda redondeada.

 

Además de estas breves pausas, hay claves que te ayudan a incorporar actividad física a tus días:

  • Luego del desayuno, tomarse unos breves minutos para elongar, al igual que antes de acostarse.
  • Caminar para realizar las actividades cotidianas como al realizar las compras, pasear las mascotas, bajarse una o dos paradas antes del colectivo o directamente caminar hacia el trabajo.
  • Elegir siempre las escaleras en vez del ascensor.
  • Practicar algún deporte regularmente. Realizar caminatas diariamente, se estima que el ser humano debe caminar por lo menos 50 cuadras todos los días.
  • Al terminar el día, elegir música y bailar. Además de ser saludable, es divertido. Agregar un poco de diversión a toda rutina ayuda a mantenerla.
  • Realizar 3 pausas activas de 10 minutos a lo largo del día, elongando el cuerpo entero.
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