¿Mal aliento? No desesperes, es posible combatirlo

¿Mal aliento? No desesperes, es posible combatirlo

La halitosis o mal aliento tiene generalmente un origen bucal -60 por ciento de los casos-, pero también hay una proporción de pacientes -20 por ciento- que padece estos problemas por otras causas, como patologías respiratorias o digestivas, por ejemplo. A estos dos grupos, se suma un 20 por ciento que cree de manera errónea que padecen este trastorno, una falsa sensación provocada por tener la boca seca, el estrés o la ansiedad.
El mal aliento es causa de rechazo y discriminación entre pares. La mayoría de quienes poseen Halitosis no son conscientes, pero también hay quienes no saben cómo combatirla.

La Halitosis es generalmente provocada por bacterias, se estima que el 25% de la población mundial la padece. Esta situación, caracterizada por un olor desagradable, se manifiesta la mayoría de las veces cuando la estructura de la boca se encuentra en reposo sin un flujo normal de saliva, tras varias horas de sueño, por ejemplo.

El origen de la halitosis puede deberse a una deficiente limpieza bucal, a una gastritis crónica y hasta incluso a enfermedades como cáncer de pulmón.

La descomposición bacteriana, producto de los alimentos que se encuentran entre los dientes, de las células de mucosa oral y de la saliva, produce ácido butírico, ácido propiónico, ácido valérico y también componentes de sulfurados derivados de las proteínas, dando como resultado el gusto y olor característico.

Consejos para combatirla

  • Evitar el tabaco, café, alcohol, cebolla y ajo.
  • Realizar un cepillado dental completo y gárgaras con enjuague bucal al menos tres veces al día.
  • Utilizar colutorios bucales y seda dental para contribuir a una limpieza integral de la boca, eliminando los restos de comida.
  • Beber abundante agua
  • Consumir chicles sin azúcar. Los chicles con Xilitol tienen efecto bacteriostático, pues la fermentación por las bacterias presentes en la boca no produce ácidos y no es cariogénico.
  • Realizar consultas periódicas con un odontólogo y someterse a limpiezas que eliminen residuos bucales y sarro.

En casa

  • Puedes realizar enjuagues de perejil, también ayuda el té de menta o té negro.
  • Masticar canela, calvo o anís luego de las comidas.
  • Cepillarse con bicarbonato de sodio y dentífrico, sin que se vuelva un habito pues tiene efectos corrosivos.
  • Consumir vitamina C, también mejora el aliento al combatir las potenciales causas generadoras.
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